“La publicidad, ¿a quién le importa?…”. Esta es la pregunta con la comienza la campaña llevada a cabo por Autocontrol. La respuesta, para los que nos dedicamos a este fantástico mundo, siempre es la misma: “a mi me importa. Es más, me encanta”. Con esta premisa compartimos, de nuevo, los delirios de un creativo, el nuestro 🙂
Porque creamos ideas, solucionamos problemas, fabricamos sueños y hacemos, o al menos, intentamos hacer de este mundo algo un poco mejor con creatividad y pasión, con arte.
Por eso, cuando vemos una buena idea nos gusta predicarlo a los cuatro vientos, compartirlo con todos aquellos para los que el universo publicitario es una galaxia llena de ingenio, imaginación y mucha pasión.
La que te contamos ahora es una de esas ideas y es que, aparentemente, no existe ninguna conexión entre el agua embotellada y el Jazz. Sin embargo, la agencia “Banda Agency” ha conseguido generar un vínculo bastante atractivo colocando una máquina expendedora de agua bastante peculiar en un festival de Jazz (Loud Jazz Festival) en Ucrania.Esta máquina incorporaba un piano donde, al demostrar la destreza con las teclas, regalaba una botella de agua de la marca Borjomi.
Sin duda, una acción para colocarse el babero y disfrutar.
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